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Cubierta de La Ciudad Justa en tonos verdosos y dorados, con algunos detalles florales en color salmón. En la mitad superior, en el centro, se puede leer el título de la novela enmarcado en un círculo con la silueta de una tuerca, en la parte inferior, centrada, una estatua del dios Hermes con sus pies alados, posada sobre una flor abierta. Alrededor se aprecian elementos florales y símbolos importantes para la novela como engranajes y pergaminos, el arco y la flecha que representan a Apolo o el casco y la lechuza de Atenea. Toda la cubierta está enmarcada por una espiral verde imitando las cenefas clásicas griegas.

La ciudad justa

Jo Walton

La ciudad justa fue finalista como Mejor Novela del Mithopoeic Fantasy Award en 2017 y el Prometheus Award.

Atenea, diosa griega de la sabiduría, quiere hacer un experimento ¿Qué pasaría si se aplicaran las ideas de La República de Platón en la realidad? En una isla mediterránea perdida reúne a devotos del filósofo de todas las épocas para convertirlos en maestros de la utópica ciudad, y a 10.000 niños de diez años para poblarla… Y luego están los robots, por supuesto, porque alguien tiene que hacer el trabajo duro.

Conoceremos la historia a través de los puntos de vista de Maia (una dama victoriana sedienta de conocimiento), Simmea (una niña brillante que cree a pies juntillas en el proyecto) y el dios Apolo, que elige experimentar una vida mortal como un niño más (o lo intenta). Por supuesto, nada sale como estaba planeado, y con la llegada de Sócrates a la ciudad, entre robots que despiertan y niños que se rebelan, todos comenzarán a hacerse las preguntas incorrectas.

La ciudad justa es una fantasía utópica brillante que juega con la filosofía griega y explora los conceptos de la libertad y el libre albedrío sin dejar de ser rabiosamente divertida.

Traducido del inglés por Blanca Rodríguez.